Patricia Aguilar Pardo
Veracruz, Ver.-  Tras ser exhibido en las redes sociales, por haber abandonado la celebración de una misa en la iglesia “Juan Diego”, ubicada en el municipio de Alvarado, el sacerdote Bartolomé  Paván Hernández, cura de la parroquia de la Santa Cruz, en esa localidad, reconoció que vivió un momento de enojo al ver en el templo católico a una  persona con quien previamente había tenido ciertas diferencias.

En entrevista, el sacerdote relató que la persona con quien tuvo un conflicto prestaba servicio en la parroquia a su cargo y que responde al nombre de   “Chuchito”.

“Chuchito” le había reportado la desaparición de un teclado que utilizaba en la celebración de la homilía,  sin embargo acordaron que él (el sacerdote) iba a convocar a los feligreses para que lo apoyarán con alguna aportación económica y asi comprar el instrumento.

No obstante , “Chuchito”  a través de su red social Facebook denunció por diferentes canales de internet algunas supuestas irregularidades en la parroquia y por eso decidió suspenderlo de sus actividades.

Sin embargo, a pesar de que él estaba suspendido, refiere el sacerdote, éste se hizo presente en otra misa en memoria de una persona fallecida, desobedeciendo la instrucción que él había dado.

“Sí, me salí -de la misa- al ver a este muchacho, ya son 4 veces con esta misma actitud, yo al llegar a la Capilla al verlo, sinceramente, digo bueno, sigues con tus caprichos con tu desobediencia, lo habían invitado sabiendo que ya estaba prohibido, suspendido, a nadie se le prohibe asistir a misa, pero sí suspendido en una labor”, externó el clérigo.

Reconoció que tras abandonar la Iglesia, tomó su carro y dio una vuelta para tomar aire, pero regresó y terminó la Eucaristía.

El Sacerdote aseveró que la intención es aclarar los hechos para que conozcan de fondo su actuar, y no sólo conozcan una parte de la historia, además de ofrecer una disculpa a las personas que pudieron ofenderse por su actuar ante esta situación.