Verónica Arriola, Orizaba, Ver., 16 de septiembre de 2025.- Con profunda tristeza y consternación, familiares y amistades del matrimonio conformado por la señora Beatriz “N” y Eduardo “N” les dieron el último adiós luego de que fueron víctimas de parricidio perpetrado el pasado sábado 14 de septiembre en la Unidad Habitacional El Trébol.

Fue al mediodía cuando se desarrolló una misa dentro de un velatorio ubicado en céntricas calles de Orizaba en el que oraron por el eterno descanso del ambos abuelitos de 70 y 73 años de edad respectivamente, los cuales fueron velados el pasado sábado 14 y domingo 15 en dicho lugar.

Una vez concluida la eucaristía, los ataúdes de madera barnizados con los restos mortales de este matrimonio fueron ingresados a las carrozas una de color blanco y otra más de gris oscuro para ser llevados a su última morada: el Panteón Juan de la Luz Enríquez.

El cortejo fúnebre partió de la Poniente 3 hasta bajar por Sur 10 y dar vuelta en Poniente 5 seguir su trayecto hasta bajar en Sur 2 e incorporarse a Poniente 7 y Oriente 6 hasta llegar al cementerio en el que los aguardaban familiares y amigos que previamente fueron trasladado en un servicio de transporte en donde finalmente fueron despedidos en medio de lágrimas y aplausos.

Desafortunadamente, la muerte de ambos abuelitos ocurrió el pasado sábado derivado de una discusión que tuvieron con su hijo Marco Antonio “N” de 53 años de edad, quien los atacó a golpes y asesinó con un arma punzo cortante, siendo un hecho que fue alertado por los vecinos quienes pidieron el auxilio de la Policía Municipal y aunque acudieron hasta el lugar, desafortunadamente ya había huido de la escena del crimen y hasta el momento sigue prófugo de la justicia.